Es aquella posibilidad en la que el cliente puede llegar a tener una gran pérdida, por ejemplo aeronaves, buques, plataformas marítimas, empresas con riesgos potenciales de pérdidas.
Son riesgos que son difíciles de cubrir por la mayoría de las compañías aseguradoras, por ejemplo Responsabilidad Civil para acrobacias aéreas, seguros para tauromaquia (toreros), boxeadores o prácticas donde la persona es profesional y está expuesta a un riesgo extraordinario.